Con la llegada de septiembre y la vuelta a la rutina, son ya muchos quienes dan por finalizada la temporada de baño. Antes de empezar a apilar leña para la chimenea, debemos pensar en preparar la piscina para que aguante los meses de frío. Hacerlo correctamente nos va a permitir ahorrar mucho tiempo y dinero de cara al próximo año.
Desde Capcovers te damos unos consejos para cuando decidas que ha llegado la hora del último chapuzón. No son nada complicados, y gracias a ellos disfrutarás de la piscina desde el primer momento cuando llegue el calor.
Prepara tu piscina para el invierno
1. ¿Llena o vacía? Esta es una de las primeras preguntas que surgen cuando empieza el frío. El agua de la piscina tiene una “vida útil” de cinco años, por lo que mantenerla es mejor para nuestro bolsillo y, por supuesto, para el medioambiente. No hacerlo puede conllevar un gasto hasta seis veces superior al inicio de la siguiente temporada. En cualquier caso, asegúrate de que el nivel del agua queda por debajo de los skimmers, para que no sufran en caso de congelación del agua.
2. Te aconsejamos una limpieza a fondo para dejar la piscina en condiciones óptimas antes de prepararla para el invierno: filtro, skimmers, fondo y paredes. En caso de que sea posible, retira las escaleras, vacía el agua de las duchas y protégelas de las inclemencias del tiempo forrándolas con plástico, por ejemplo. Si vives en una zona de mucho frío o con tendencia a las heladas, lo mejor es dejar objetos flotando en el agua de la piscina, como unas botellas de plástico, para que sean ellos los que soporten la presión del hielo y reducir el riesgo de fisuras o roturas en el vaso.
3. Los productos indispensables para el mantenimiento del agua durante el invierno son el estabilizador de pH, el alguicida y el desinfectante (cloro). El nivel de pH debe estar siempre entre 7.2 y 7.6 para que el efecto desinfectante sea idóneo y el agua no se enturbie, y el alguicida evita que el agua tome un tono verdoso, que puede pasar también a las paredes de la piscina. Recuerda que cuando la temperatura del agua sea superior a los 15º deberás intensificar el control.
En caso de que tu piscina esté ubicada en una segunda residencia, puedes optar por el invernaje, con productos específicos que solo necesitan dos dosis por año y dos sesiones de depuración del agua. Para ser realmente eficaz, se debe realizar previamente una cloración de choque con la bomba en movimiento, así como mantener funcionando el filtro para asegurar una distribución homogénea del producto. Durante el tiempo que la piscina esté invernada nadie puede utilizarla.
La depuradora deberá funcionar unas horas a la semana, aunque puedes ir reduciendo su uso de progresivamente conforme vayan bajando las temperaturas. De la misma forma, deberías pasar el limpiafondos cuando veas que empieza a acumularse la suciedad.
4. Lo ideal es cubrir la piscina, protegiéndola de hojas, tierra y otros elementos, que contribuyen al aceleramiento de la descomposición del agua, y de la luz solar. También protege los mecanismos de la bomba, impide la evaporación del agua y mantiene más estable la temperatura, lo que disminuye el uso de productos químicos entre un 35-50%. Por último, es un perfecto sistema de seguridad para evitar caídas inesperadas de niños o de mascotas.
Puedes hacerlo con un cobertor de pvc fijo o con una cubierta automática. Lo bueno de estas últimas es que, además, disfrutarás de la ventaja de poder controlar periódicamente el estado del agua con solo girar una llave. Así te podrás asegurar si continúa en buen estado o si es necesario algún cuidado extra.
5. Si la opción es dejarla abierta, tal cual, el mantenimiento ha de ser constante. La depuradora deberá funcionar más tiempo, sin contar, claro, que las cantidades de producto utilizadas serán mayores, al igual que la acumulación de residuos.
Aunque parezca un engorro, estas tareas de mantenimiento no deberían robarte más de un par de horas al mes ¡Nada, si lo comparamos al tiempo que tendrías que invertir en caso de que te desentendieras de la piscina durante todos estos meses!